Marcos. 1976, Vigo.
Cosas que han dicho de él en el Enorme Aparato Mediático de la Anglogalician Cup:
- Marcos – “The Engine” covered every blade of plastic on the pitch, with plenty left in the tank for the ale session afterwards.
En Ruminations On A Trophy Lost, A Hangover Gained - the ...
- He missed Charlie and Marcos “the Engine” “Twat!” en la canción I Got Those Old Anglo-Galician Cup Hangover Blues Again Mama
- Marcos fue el Man of the Match por parte de los gallegos.
En El Mejor De Todos Los Instrumentos, La Infantería Británica
- Inconmensurables Fontaiña y Marcos en la retaguardia.
Treboadas De Aceiro Alén Do Arco Da Vella
- "Marcos - Robbie Mustoe. Named Robbie the Red Engine for his incredible work rate. Marcos is actually a better footballer though… " cuando Boroman le puso la camiseta del Boro.
- "Meu, deja ya de correr" . La Inglaterra de porcelana blanca y los muros de ladrillo de las casas de clase obrera es testigo.
Campañas: 10
Bagaje: 6 victorias; 4 derrotas.
La Entrevista: Renuncié a Todo Excepto a La Victoria
Alcumes: Paila, Otto_Vigo, Elquenuncahacenada
The Loneliness of the Long Distance Runner: Mejor marca personal en un maratón: 2 horas y 42 minutos.
Blade ou Owl?: Owl
Estatus de Pionero: Colgó las botas el 12-5-2015.
Soy un ciervo: de siete púas,
ResponderEliminarsoy una creciente: a través de un llano,
soy un viento: en un lago profundo,
soy una lágrima: que el Sol deja caer,
soy un gavilán: sobre el acantilado,
soy una espina: bajo la uña,
soy un prodigio: entre flores,
soy un mago: ¿quién sino yoinflama la cabeza fría con humo?
Soy una lanza: que anhela la sangre,
soy un salmón: en un estanque,
soy un señuelo: del paraíso,
soy una colina: por donde andan los poetas,
soy un jabalí: despiadado y rojo,
soy un quebrantador: que amenaza la ruina,
soy una marea: que arrastra a la muerte,
soy un infante: ¿quién sino yoatisba desde el arco no labrado del dolmen?
Soy la matriz: de todos los bosques, soy la fogata: de todas las colinas,
soy la reina: de todas las colmenas,
soy el escudo: de todas las cabezas,
soy la tumba: de todas las esperanzas.
Desde allí, mantuvo fija la vista en aquella hermosa trampa rebosante del cebo de las jarras de cerveza que le conducirían hasta la mejor e inimitable especie de olvido que existía
ResponderEliminarFighting out of the red corner, wearing the white trunks with black trim, and weighing in at
ResponderEliminaralunos no hacen 42 km en dos horas, 40', ni en tractor
ResponderEliminarEs como una droga
ResponderEliminarla tierra
que me llama y me envenena
que me duele entre las uñas
me regala su riqueza
y solo pide que la cuide
me enamora
la tierra
me relaja y no se acaba
se renueva, resquebraja
esta tierra me da vida
desestresa
me humaniza y me magrea
me alimenta y me reclama
cuanto tiempo lejos...
si acaso volver pudiera...
porque sé que me espera...
Algún día.
¿Verdad, tierra mía?
Es cierto que surgen nuevos caminos, pero los viejos siguen sirviendo. No se cubren de hierbajos. Allí…, allí está la eternidad. Sólo las matemáticas no tienen miedo de ella. Allí comprendí lo definitivas que son. Y fuertes. No había nada semejante. Y también fue bueno que resultaran tan difíciles…
ResponderEliminarUnha baixa irreparabél
ResponderEliminarTan gloriosa es una bella retirada como una gallarda acometida
ResponderEliminarY Marcos salió corriendo tras la XII
ResponderEliminarLógico
y aún no ha parado de escapar de la Manada
ResponderEliminar3618 millas náuticas
otros las colgaron el siglo pasado y siguen jugando
ResponderEliminarAsabandadas ridan
ResponderEliminarridan blacuas
musdean blacuas.
Asabandadas bandis
bandis recean.
He viajado lo mío, creía que ya lo sabías.
ResponderEliminarHe viajado lo mío, por los caminos
He viajado lo mío, he vagado mucho y he jugado mucho
Main, sí que he viajado lo mío.
He viajado en mercancías rápidos, creía que lo sabías.
He viajado en mercancías, por los caminos
He viajado con pasajeros ciegos, gente sin salida, pateando cenizas
Señor, sí que he viajado lo mío.
He trabajado en minas de roca, creía que ya lo sabías
He manejado una excavadora de presión, por el camino.
He tirado de martillo, he chupado el aire de los respiraderos, seis pies de barro
Y claro que he quitado fango
Y, Main, me ha tocado viajar lo mío.
Así la rueda de las estaciones
ResponderEliminarte será dulce, ya el verano vista
la tierra de verdor, o el petirrojo
se pose y cante en la desnuda rama
del musgoso manzano, entre mechones
de nieve blanda, mientras a su lado
la techumbre de paja humea al sol;
ya caigan del alero
las gotas de rocío, sólo audibles
en la quietud que sigue a la tormenta,
o el oficio secreto de la escarcha
las torne estalactitas refulgentes,
calladas bajo la callada luna.
Si, 7 años de servicio. Sheffield ha cambiado mucho en todo ese tiempo. El aire es más sucio y el sexo más limpio
ResponderEliminarcuando uno no da el perfil, debe ponerse de lado
ResponderEliminarEn esta fiebre en que está inmerso el porno americano tratando de dignificar por fin a los actores negros, y de la que nosotros solo somos un reflejo más, muchos lectores parecen haber aborrecido este giro y nos critican por publicar “demasiadas” escenas con actores afro. Por lo visto no pueden desarrollar con ellos la empatía que sí consiguen con los actores blancos, y eso es un problema evidente y particular de cada uno que tiene nombre.
ResponderEliminar42 km de distancias
ResponderEliminarLa ironía suprema sería darse cuenta de que ellos fueron más felices que nosotros lo somos hoy. ¡Maldita sea la historia!
ResponderEliminarNo hay que confundir al club de los 69 con el club del 69. Ojo.
ResponderEliminarLos osos que interpretan osas suelen ganar Óscares, cuidado DiCaprio.
Preferíamos a la familia michoacana cuando su giro eran los helados y las paletas.
2016 es muy mal año para estar vivo y ser famoso.
Vayamos en contra de la RAE y digámosle gasolinería a la gasolinera.
2016 ya ha corrido un mes.
ResponderEliminarNuevas entrada para problemas viejos
ni 42 km de orange plank road pueden silenciar el dolor de una partida
ResponderEliminarDe cuando estuve loco aún conservo
ResponderEliminarel carné de majara en la cartera,
un plano detallado del infierno,
un cielo de pirañas y goteras,
un prontuario en la comisaria,
un frasco con pastillas de colores,
la carta con la que te despedías,
remedios varios contra el mal de amores.
Ahora voy rumbo al sur a sentar plaza
desdeñando otros puntos cardinales
y el sol encarcelado en la terraza.
Voy rumbo al sur buscando tus besos espirales.
Atrás dejo kilómetros de afueras,
aire por respirar, luces en rojo.
Hacia donde señalan tus pezones
voy a toda pastilla dando gas a la moto.
De cuando estuve loco aún conservo
un par de gramos de delirio en rama,
por si atacan con su razón los cuerdos
y un viento fuerza seis de tramontana;
el vicio de escribir por las paredes
pareados de amor, y la manía
de buscarte entre todas las mujeres
que en horas bajas me hacen compañía.
Cuando rozo tus pétalos, nenúfar
que sobrevive en aguas estancadas
saltan chispas, los cables se me cruzan,
se me sube el mercurio y me salta la alarma.
Mono de ti que me obliga a llevarte
en sobres rojos, liofilizada,
para tomarte cuando me apeteces
a sorbos cortos donde duele la madrugada.
Te escribo desde un área de servicio
donde sólo me ofrecen gasolina.
Puedes llamarme a cobro revertido
desde la caracola de la esquina.
El tinto de verano me recuerda,
ResponderEliminaren toda su patética crudeza,
la Patria que regüelda y que bosteza.
Prefiero que me cuelguen de una cuerda.
El tinto de verano es una mierda.
Si alguno lo prefiere a la cerveza
(y a fe que no me cabe en la cabeza),
que, al menos, la conciencia le remuerda.
¡Bendita la rubísima cebada
que el lúpulo aromático perfuma,
en cúpulas de acero fermentada!
Quién puede estar abúlico ni triste
hundiendo los hocicos en espuma,
(que dice el diccionario que es el giste).
vuelve
ResponderEliminarDe aquí al 21 de Octubre,
ResponderEliminaruna maratón
sacrificio, sangre, sudor y risas
Come On Porcos Bravos
un ejemplo a seguir
ResponderEliminarPor encima del mar, sobre las cordilleras,
ResponderEliminara través de los valles, los bosques y los ríos,
por sobre los oasis y arenales desérticos,
por sobre los callados horizontes sin límites
y las deshabitadas regiones de las nieves
va pasando la voz, nos va llegando
tristemente la voz que nos lo anuncia.
José Stalin ha muerto.
A través de las calles y las plazas de los
grandes poblados,
por los anchos caminos generales y
perdidos senderos,
por sobre las atónitas aldeas, asombradas campiñas,
planicies solitarias, subterráneos
corredores mineros, olvidadas
islas y golpeados litorales desnudos
va pasando la voz, nos va llegando
tristemente la voz que nos lo anuncia.
José Stalin ha muerto.
Va cruzando las horas oscuras de la
noche,
la madrugada, el día, los extensos
crepúsculos,
todo lo austral y nórdico que
comprende la tierra,
y no hay razas, no hay pueblos, no hay rincones,
no hay partículas mínimas del mundo
en donde no penetre la voz que va llegando,
la voz que tristemente nos lo anuncia.
José Stalin ha muerto.
II
(A dos voces)
1. Padre y maestro y camarada:
quiero llorar, quiero cantar.
Que el agua clara me ilumine,
que tu alma clara me ilumine
en esta noche en que te vas.
2. Se ha detenido un corazón.
Se ha detenido un pensamiento.
Un árbol grande se ha doblado.
Un árbol grande se ha callado.
Mas ya se escucha en el silencio.
1. Padre y maestro y camarada:
solo parece que está el mar.
Pero las olas se levantan,
pero en las olas te levantas
y riges ya en la inmensidad.
2. Cerró los ojos la firmeza,
la hoja más limpia del acero.
Sobre su tierra se ha dormido.
Sobre la Tierra se ha dormido.
Mas ya se yergue en el silencio.
1. Padre y maestro y camarada:
vuela en lo oscuro un gavilán.
Pero en tu barca una paloma,
pero en tu mano una paloma
se abre a los cielos de la paz.
2. Callan los yunques y martillos.
el campo calla y calla el viento.
Mudo su pueblo le da vela.
Mudos sus pueblos le dan vela.
Mas ya camina en el silencio.
1. Padre y maestro y camarada:
fuertes nos dejas, Mariscal.
como en las puntas de la estrella,
como en las puntas de tu estrella
arde en nosotros la unidad.
2. Vence el amor en este día.
El odio ladra prisionero.
La oscuridad cierra los brazos.
La eternidad abre los brazos.
Y escribe un nombre en el silencio.
III
No ha muerto Stalin. No has muerto.
Que cada lágrima cante
tu recuerdo.
Que cada gemido cante
tu recuerdo.
Tu pueblo tiene tu forma,
su voz tu viril acento.
No has muerto.
Hablan por ti sus talleres,
el hombre y la mujer nuevos.
No has muerto.
Sus piedras llevan tu nombre,
sus construcciones tu sueño.
No has muerto.
No hay mares donde no habites,
ríos donde no estés dentro.
No has muerto.
Campos en donde tus manos
abiertas no se hayan puesto.
No has muerto.
Cielos por donde no cruce
como un sol tu pensamiento.
No has muerto.
No hay ciudad que no recuerde
tu nombre cuando era fuego.
No has muerto.
Laureles de Stalingrado
siempre dirán que no has muerto.
No has muerto.
Los niños en sus canciones
te cantarán que no has muerto.
Los niños pobres del mundo,
que no has muerto.
Y en las cárceles de España
y en sus más perdidos pueblos
dirán que no has muerto.
Y los esclavos hundidos,
los amarillos, los negros,
los más olvidados tristes,
los más rotos sin consuelo,
dirán que no has muerto.
La Tierra toda girando,
que no has muerto.
Lenin, junto a ti dormido,
también dirá que no has muerto.
Los más audaces ruedan por espeluznantes callejuelas,
ResponderEliminarincendiando el helado crepúsculo.
Los más audaces ruedan por
espeluznantes callejuelas
¿Sabes?, creo que podría decir desafilada el cielo esta noche
y podría quedarme plácidamente a contemplar
como termina el espectáculo soñado
con una cerveza fría en la mano
con una sonrisa en los labios
El juez Somers
ResponderEliminar¿Cómo fue, díganmelo ustedes,
que yo, el más erudito de los abogados,
que me sabía a Blackstone y a Coke
casi de memoria, el que pronunció el más grande discurso
que haya escuchado jamás la corte, y escribió
un alegato que se ganó el elogio del magistrado Breese—
cómo fue, díganmelo ustedes,
que yazgo aquí sin señal alguna, olvidado,
mientras Chase Henry, el borracho del pueblo,
tiene un pedestal de mármol coronado por una vasija
en la que la naturaleza, por capricho irónico,
ha sembrado hierba floreciente?